Un refugio de Esperanza y cura

El cáncer puede ser una montaña empinada y desafiante en la vida de quien lo enfrenta y quienes lo rodean. Pero también es un poderoso recordatorio de la extraordinaria fuerza del espíritu humano. Es una enfermedad que viene a enseñarnos que la vida es frágil y preciosa y que nos impulsa a abrazar cada día con gratitud y determinación.  

El cáncer puede ser una montaña empinada y desafiante en la vida de quien lo enfrenta y quienes lo rodean. Pero también es un poderoso recordatorio de la extraordinaria fuerza del espíritu humano. Es una enfermedad que viene a enseñarnos que la vida es frágil y preciosa y que nos impulsa a abrazar cada día con gratitud y determinación.  

Hospital El Pilar cuenta desde febrero de 2020 con la Unidad de Oncología, diseñada por el Dr. Giovanni Reynoso, oncólogo, con el objetivo de que varios especialistas participen en la atención del paciente con cáncer desde la prevención y su diagnóstico temprano hasta su tratamiento. Además, dentro de la unidad se llevan protocolos de investigación liderados por el Dr. Reynoso y se cuenta con pacientes en ensayos clínicos con medicamentos novedosos para tratar la enfermedad, siendo El Pilar uno de los hospitales del mundo que forma parte de los centros de investigación del cáncer.  

Para el Dr. Reynoso el cáncer es una enfermedad única y distinta del resto que durante toda la historia de la medicina nos ha llevado pasos de ventaja. Sin embargo, la incansable investigación avanza cada vez un poco más hacia un mundo en el que el cáncer sea una palabra que inspire esperanza en lugar de miedo.  

Los médicos externos que atienden pacientes de la Unidad de Oncología:  

hacen énfasis en la importancia de la prevención y detección temprana de la enfermedad. Es por ello por lo que en el hospital se realizan jornadas de prevención, pasando por etapas de divulgación de información sobre cánceres prevenibles como el cáncer de mama y de cérvix en la mujer y cáncer de próstata en el hombre, así como el cáncer de colon y cáncer gástrico, muy prevalentes en Guatemala.  

Esta Unidad trabaja de la mano con la Unidad de la Mujer cuyo objetivo es brindar atención e información para la prevención de cánceres de la mujer y un cuidado integral en el caso de pacientes diagnosticadas. 

En el hospital contamos con todo lo necesario para tratar a los pacientes oncológicos, tal es el caso de una paciente joven de 36 años diagnosticada por la Dra. Molina con cáncer de mama, a quien se le realizó una cirugía conservadora, recibió quimioterapia y radioterapia en la Clínica  

La Asunción.Posteriormente se le realizó una histerectomía y continuó con tratamiento biológico con el Dr. Reynoso.  

Un caso especial donde fueron aplicados muchos de los tratamientos que ofrece El Pilar y en el que los doctores agradecen la referencia de los médicos para lograr un diagnóstico a tiempo.  

Los pacientes oncológicos tras finalizar su tratamiento tocarán la campana, una costumbre que comenzó en un hospital de Houston por sugerencia de un paciente ex marino que después de terminar la radiación y la quimioterapia propuso que al igual que en los barcos de guerra tocaban una campana en señal de terminar una tarea asignada, los pacientes de cáncer debieran hacerlo para celebrar la culminación de una tarea compleja y difícil para él y su familia, lo que los llena de orgullo y esperanza.  

El ambiente en la Unidad de Oncología puede ser difícil, sin embargo, la Dra. Molina menciona que las risas no faltan, pues esto ayuda a los pacientes a sentirse un poco mejor a pesar del diagnóstico que están atravesando. “Tenemos que bailar con la muerte todos los días” dice con nostalgia una altruista con la convicción de salvar vidas, lo que la llevó además a seguir esta especialidad que es un faro de esperanza en medio de la tormenta.  

Una tormenta que no acaba tras el tratamiento. Pero en la que el paciente seguirá de mano de sus médicos con un follow up de al menos 5 años para vigilar que no exista recurrencia del cáncer y si la hay, detectarlo de manera temprana para tener una mayor probabilidad de que sea curable. 

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