Es una enfermedad en la que las células anormales crecen sin control en los pulmones. Es uno de los tipos de cáncer más comunes y mortales en todo el mundo, y se asocia con el tabaquismo, aunque también puede ser causado por la exposición a ciertas sustancias químicas y por factores genéticos.
Los síntomas del cáncer de pulmón pueden incluir tos persistente, dificultad para respirar, dolor en el pecho, pérdida de peso sin causa aparente y cansancio extremo. Sin embargo, en muchos casos, el cáncer de pulmón no presenta síntomas hasta que se encuentra en una etapa avanzada.
El tratamiento del cáncer de pulmón depende de varios factores, como el tipo y la etapa del cáncer, la edad y el estado general de salud del paciente. Las opciones de tratamiento pueden incluir cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia dirigida y terapia inmunológica. El objetivo del tratamiento es eliminar o controlar el cáncer y mejorar la calidad de vida del paciente.
Es importante destacar que la prevención es la mejor estrategia para reducir el riesgo de cáncer de pulmón. Esto incluye dejar de fumar y evitar la exposición al humo del tabaco y a otras sustancias químicas conocidas por causar cáncer de pulmón. Si presentas síntomas de cáncer de pulmón o tienes un mayor riesgo debido a factores como el tabaquismo o la exposición a sustancias tóxicas, consulta a tu médico para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento adecuados.