Los síntomas después de una tumorectomía, también conocida como cirugía conservadora de la mama o lumpectomía, pueden variar según cada persona y la respuesta individual al procedimiento quirúrgico. A continuación, se mencionan algunos posibles síntomas y efectos secundarios que se pueden experimentar después de una tumorectomía:
- Dolor: Es común experimentar dolor y molestias en el área de la cirugía. El dolor puede variar en intensidad y duración, y generalmente disminuye con el tiempo.
- Inflamación y hematomas: Tras la cirugía, puede que se presente inflamación en la tumorectomía y la formación de hematomas. Estos síntomas disminuyen gradualmente según se recupera.
- Cambios en la sensibilidad: Puede haber cambios en la sensibilidad de la mama y la piel circundante después de la tumorectomía. Esto puede incluir entumecimiento, sensación de hormigueo o aumento de la sensibilidad.
- Cambios en la apariencia: La tumorectomía implica la extirpación del tumor y una porción de tejido mamario. Como resultado, puede haber cambios en la forma o el tamaño de la mama afectada.
- Cicatrización: Después de la cirugía, se formará una cicatriz en el lugar donde se realizó la incisión. La apariencia y la evolución de la cicatriz pueden variar en cada persona.
- Cambios emocionales: La experiencia de someterse a una cirugía de mama puede tener un impacto emocional significativo. Es posible experimentar una amplia gama de emociones, como ansiedad, preocupación, tristeza o cambios en la imagen corporal.
- Efectos secundarios a largo plazo: Algunas personas pueden experimentar efectos secundarios a largo plazo después de la tumorectomía, como cambios en la forma o la textura de la mama, cambios en la sensibilidad y posibilidad de linfedema en el brazo si se extirparon ganglios linfáticos.