La faringitis es una inflamación de la faringe, que es la parte posterior de la garganta, causada por una infección viral o bacteriana. Los síntomas comunes de la faringitis incluyen dolor de garganta, dificultad para tragar, fiebre, dolor de cabeza, fatiga y dolor de cuerpo.
El diagnóstico de la faringitis se realiza mediante un examen físico y, a veces, mediante pruebas de diagnóstico, como un cultivo de garganta. El tratamiento de la faringitis depende de la causa de la infección. Si es causada por una infección viral, no se necesitan antibióticos y se pueden tomar medidas para aliviar los síntomas, como tomar líquidos calientes, chupar caramelos duros y usar analgésicos de venta libre para aliviar el dolor y la fiebre. Si es causada por una infección bacteriana, se pueden recetar antibióticos.
Es importante destacar que la prevención es la mejor estrategia para evitar la faringitis. Esto incluye lavarse las manos con frecuencia, evitar el contacto cercano con personas enfermas y cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar. También se pueden tomar medidas para fortalecer el sistema inmunológico, como mantener una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente y dormir lo suficiente.