Es una enfermedad infecciosa causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis. Afecta principalmente a los pulmones, pero también puede afectar otros órganos del cuerpo. Los síntomas de la TB incluyen tos con moco o sangre, fiebre, sudores nocturnos, pérdida de peso y fatiga. La infección por TB se propaga de persona a persona a través de pequeñas gotas en el aire cuando una persona con TB activa tose o estornuda.
El diagnóstico de la TB se realiza mediante pruebas como una radiografía de tórax, análisis de esputo y pruebas de tuberculina. El tratamiento de la TB implica tomar medicamentos durante varios meses para eliminar la bacteria. Es importante tomar los medicamentos exactamente según lo recetado y durante todo el tiempo que se indique para evitar que la TB se vuelva resistente a los medicamentos.
La prevención de la TB implica medidas para evitar la propagación de la enfermedad, como cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar, ventilar adecuadamente las habitaciones y evitar el contacto cercano con personas enfermas. También se puede prevenir la TB mediante la vacunación con la vacuna BCG.
Si tienes síntomas de TB, es importante buscar atención médica lo antes posible para un diagnóstico y tratamiento adecuados. La TB puede ser grave si no se trata y puede llevar a complicaciones graves.
